Friday, March 17, 2006

Un consejo

Vas a sufrir..... si! perdóname que te lo diga, y harás sufrir así es nuestra naturaleza, de cualquier manera no te agobies es imposible poseer del todo a esa persona amada; Y me preguntas que hacer entonces? ...muy sencillo "ámalo" intensamente, el momento, el instante, el minuto que compartes, pues no sabes si en ese momento de éxtasis te lleve la muerte y cual gloriosa sería tu partida al estar llena de dicha y alegría.

¿Quién le teme a la muerte?

Tiempo


Tic tac tic tac.........25,26,27,28,29 años 1,2,3 meses TIEMPO! me vuelves loca! no me dejas vivir, que el tiempo es dinero, que tu matriz se oxida, que tu piel se arruga, que te vuelves flacida que se te pasa el tren.... pinche infierno porque no te detienes porque no mejor te olvidas de mi, porfavor tiempo deja de existir y dejame simplemente vivir.

Tuesday, March 14, 2006

Quetzalcóatl, el dios bueno


Les comparto un fragmento del libro "Las Profecias Mayas" en lo personal un libro muy revelador que te muestra detalles que desconocemos de nustro entorno aunque cada quien es libre de creer en lo que quiera jeje.
Como un arquetipo Quetzalcóatl representa todo aquello a lo que debe aspirar un ser humano. El nombre de serpiente emplumada indica su naturaleza doble: las plumas simbolizan su naturaleza etérea y espiritual (el Padre) y la serpiente su conexión con la creación física (la Madre).
En un nivel mas profundo y místico el simbolo de la serpiente emplumada indica la manera en que el hombre ilustrado necesita unir los dos aspectos opuestos de su naturaleza, el espiritual y el material.
En las tradiciones esoirituales del occidente la serpiente (o en ocasiones dragón), al igual que simboliza el camino del sol a través del cielo, representa el yo inferior.
De acuerdo con las tradiciones gnósticas, cada uno de nosotros nace como una serpiente y constreñido a una vida de reptar en el polvo de la tierra. Al igual que la serpiente se renueva al deshacerse de su piel y desarrollar una nueva, así nosotros vivimos en una vida tras otra, muriendo y renaciendo, pero todavía incapaces de elevarnos de la tierra.
En este estado de inconsciencia estamos aislados de los mundos superiores del espíritu y seguimos como la progenie desamparada de la gran serpiente solar. Por esto los hijos caidos de Adán y Eva estamos prisioneros en nuestras "pieles" renovables y constreñidos a vivir una vida tras otra y experimentar muerte tras muerte en el mundo material.
Es así Coatlicue (la madre tierra) como su equivalente hindú Kali, tiene un collar de cráneos y manos desmembradas, ya que la madre tierra toma la vida al igual que la da. Pero las tradiciones gnósticas hablan tambien de un destino cósmico, de la posibilidad inherente en los humanos como almas de dejar la tierra física para viajar hacia nuestro verdadero hogar en planos superiores no materiales. Ésta es la esencia de la enseñanza espiritual de todos los grandes maestros incluyendo a Jesús, Buda, Mahoma y, podemos presumir, el original Quetzalcóatl-Kukulkán.
Mas todos ellos enseñan, si leemos sus palabras con cuidado, que para obtener la libertad se requiere de una transformación de nuestro ser. Si usamos otra metáfora, el humano ordinario vive como una oruga en la hoja de col de la vida. Ahi vive y muere miles de veces sin percatarse siquiera de la posibilidad de un desarrollo mayor. Pero así como la oruga potencialmente puede ser transformada en una bella mariposa, del mismo modo los humanos cuentan con la posibilidad de una metamorfosis superior.
No tenemos que permanecer en la etapa de la oruga de la vida para siempre, tambien podemos volvernos ángeles aun cuando todavía vivamos en un cuerpo físico. La aplicación practica de esta filosofía esotérica es el yoga e implica elevar la "energia de la serpiente" por la columna vertebral y unirla con las fuerzas del "águila" espiritual en la cabeza.
Hacer esto requiere un acto de autosacrificio supremo conforme la voluntad del individuo. La serpiente es puesta en linea con la voluntad de Dios más grande manifestada por el águila.
El individuo debe "morir" en forma bastante literal para sí mismo a fin de "renacer" y vincularse con la conciencia cósmica.

Adrian G. Gibert