Bienvenidos a este espacio donde las emociones tiemblan como la luz trémula de una vela encendida en el rincón oscuro de la mente a veces es chispeante otras tranquila y luminosa pero frecuentemente temblorosa por causa del torrente de sensaciones que invaden esta existencia.
-¿Me puede bajar en la siguiente parada señor? - dijo la muchacha que aparentaba menos edad de la que sus gastados parpados le permitían.
-No señorita, este camión va directo a Toluca, no hacemos paradas - respondió el hombre con una mueca burlona.
Bueno, pensó ella, creo que ya es hora de conocer Toluca. Sin preguntar más, regresó al mismo asiento grasiento y siguió leyendo a José Agustín, sin borrar esa sonrisita estúpida que le provocaban los narcóticos.
1 comment:
-¿Me puede bajar en la siguiente parada señor? - dijo la muchacha que aparentaba menos edad de la que sus gastados parpados le permitían.
-No señorita, este camión va directo a Toluca, no hacemos paradas - respondió el hombre con una mueca burlona.
Bueno, pensó ella, creo que ya es hora de conocer Toluca. Sin preguntar más, regresó al mismo asiento grasiento y siguió leyendo a José Agustín, sin borrar esa sonrisita estúpida que le provocaban los narcóticos.
---
Fragmento del inexistente libro "I love Toluca"
Post a Comment